Renuncio a la necesidad de tener razón y trabajo en grupo con amor

domingo, 23 de noviembre de 2014

Felicidad Humana



En esta ocasión cederé este espacio para replicar un memorable discurso presentado en 2012 en la Cumbre de Desarrollo Sustentable de las Naciones Unidas Rio + 20 por el Presidente de Uruguay, José Mújica.
El discurso es largo pero vale la pena, así que por cuestiones de espacio lo dividiré en dos entregas consecuitivas para que lo busquen amables amigos lectores. La Navidad es tiempo de alegría y reflexión y no de Buen Fin, consumismo y nuevas deudas. Lean a José Mújica y reflexionen  acerca de la Felicidad Humana.
Toda la tarde se ha estado hablando del desarrollo sustentable, de sacar a inmensas masas de la pobreza. ¡Qué es lo que aletea en nuestras cabezas?  El modelo de desarrollo y de consumo. Es el actual de las sociedades ricas. Me hago otra pregunta ¿Qué le pasaría a este planeta si los hindúes tuvieran la misma proporción de autos por familia que tienen los alemanes?  ¿Cuánto oxigeno nos quedaría para poder respirar?
 Más claro: el mundo tiene los elementos hoy materiales… como para hacer posible que  7 mil, 8 mil millones de personas puedan tener el mismo grado de consumo y de despilfarro que tienen las más opulentas sociedades occidentales? ¡será posible? o ¿tendremos que darnos otro día tiempo para otra discusión?
Porque hemos creado una civilización … en la que estamos, hija del mercado, hija de la competencia y que ha deparado un progreso material portentoso y explosivo, pero lo que fue economía de mercado ha creado sociedades de mercado.
Y nos ha deparado esta globalización que significa mirar, por todo el planeta y ¿estamos gobernando la globalización o la globalización nos gobierna a nosotros? ¿Es posible hablar de solidaridad y de que “estamos todos juntos” en una economía que está basada en la competencia despiadada? ¿Hasta dónde llega nuestra fraternidad?
 Nada de esto lo digo para negar la importancia de este evento, es por el contrario el desafío que tenemos por delante  es de una magnitud de carácter colosal y la gran  crisis  no es ecológica sino política. ¡El hombre no gobierna hoy…las fuerzas que ha desatado! Sino que las fuerzas que ha desatado gobiernan al hombre... y la vida..”
 “Porque no venimos al planeta a desarrollarnos en términos generales, venimos a la vida intentando ser felices. Porque la vida es corta y se nos va. Y ningún bien vale como la vida y esto es elemental. Pero si la vida se me va a escapar, trabajando y trabajando para consumir un “plus”  y la sociedad de consumo es el motor. Porque en definitiva si se paraliza el consumo, o si se detiene, se detiene la economía,  y si se detiene la economía es el fantasma del estancamiento para cada uno de nosotros.
Pero ese hiper consumo a su vez, es el que ¡está agrediendo al planeta! Y tiene que generar ese hiper consumo, cosas  que duran poco,  porque ¡hay que vender mucho! Y una lamparita eléctrica, no puede durar más de 1000 horas prendida. ¡Pero hay lamparitas eléctricas que pueden durar 100 mil … 200 mil horas! ¡Pero esas no se pueden hacer! Porque el problema es el mercado, porque tenemos que trabajar…
Y ¡tenemos que tener una civilización de use y tire! ¡Y estamos en un círculo vicioso! ¡Estos son problemas de carácter político! Que nos están diciendo la necesidad de empezar a luchar por otra cultura.
No se trata plantearnos volver...al hombre de las cavernas, ni tener un “monumento del atraso” Es que no podemos indefinidamente continuar gobernados por el mercado, sino que tenemos que gobernar al mercado. Por ello digo que el problema es de carácter político.
En mi humilde manera de pensar porque… los viejos pensadores definían…Epicurio, Seneca, los Aymara, que la crisis del agua, que la crisis de la agresión al medio ambiente, no son una causa. La causa es el modelo de civilización que tenemos montado.
Lo que tenemos que revisar es nuestra forma de vivir. ¿Por qué? Pertenezco a un pequeño país muy bien dotado de recursos naturales para vivir. En mi país hay 3 millones de habitantes  un poco más tres millones doscientos,  pero hay unos 13 millones de vacas de las mejores del mundo. Y unos 8 o 10 millones de ovejas estupendas. Mi país es exportador de comida, de lácteos, de carne.  Es una penillanura  casi el 90% de su territorio es aprovechable. 
¡Mis compañeros trabajadores  lucharon por las 8 horas de trabajo! ¡Ahora están consiguiendo 6 horas!  Pero el que consigue 6 horas se consigue dos trabajos; por lo tanto trabaja más que antes. ¿Por qué?  Porque tiene que pagar una cantidad de cuotas: la motito que compró, el autito que compró,  Y pague cuotas, Y pague cuotas. Y cuando quiere recordar …es un viejo reumático como yo, y ¡se le fue la vida!  Y uno se hace esta pregunta: ¿Ese es el destino de la vida Humana? Estas cosas son muy elementales:
El desarrollo no puede ser en contra de la felicidad. ¡tiene que ser a favor de la felicidad humana! Del amor…arriba de la tierra! ¡De las relaciones humanas! ¡De cuidar a  los hijos! ¡De tener  amigos! ¡De tener lo elemental! Precisamente  Porque eso es el tesoro más importante que tienen. Cuando luchamos por el medio ambiente, el primer elemento del medio ambiente se llama: la felicidad humana.
Este memorable discurso a unos días de iniciar la época navideña considere que vale la pena para reflexionar dadas todas las circunstancias  tristes por las que atravesamos en México. Por qué nosotros somos parte de esa solución si reflexionamos y cambiamos de actitud. Que el poder de su firma sea tan importante para no usarlo sin pensar esta Navidad.

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